

Una familia mendocina compuesta por cuatro integrantes (dos adultos y dos niños de 5 y 8 años) necesitó ingresos de $1.018.305 durante el mes de junio para no ubicarse por debajo de la línea de la pobreza.
Según el informe publicado este lunes por la Dirección de Estadísticas e Investigaciones Económicas (DEIE). Esto representa un 0,97% más de lo que se necesitaba en el mes de mayo.
Este dato es el de la Canasta Básica de Total (CBA) que incluye a los bienes y servicios que cubren las necesidades comunes de las personas, teniendo en cuenta los hábitos de consumo de los mendocinos. De esta manera, los hogares que cuenten con un ingreso menor al valor de la CBT se consideran pobres.
Por otra parte, la Canasta Básica Alimentaria (CBA) para una familia de las mismas características alcanzó los $413.945, un 0,26% menos de lo que necesitaron en mayo.
Esto significa que todas aquellas familias que no alcancen estos ingresos de manera mensual se encuentran por debajo de la línea de la indigencia.