“Mejor no bañar a los niños, total mañana no hay clases”; “la chata de leña cuesta 70 lucas, no la puedo pagar”; “qué lindo juicio te voy a hacer, Estado ausente”, son algunas de las descargas emocionales que surgen a estas horas en las redes sociales.

No hay gas en miles de viviendas de San Rafael

Barrios super poblados como el Constitución, Pueblo Diamante; algunos donde hay familias con mayor poder adquisitivo como Unimev, Sat en pleno centro; otros de la zona sur, como Isros y Balloffet, tienen casas donde el gas ya no sale.

Mientras algunos recurren a salamandra o estufas eléctricas, se van sumando barrios del norte y noreste de la ciudad como el Smata, Villa Laredo y el Cristiano o el Unión Obrera.

Zonas más céntricas como en el barrio Docente, el Comisso, el Bancario y un poco hacia el oeste, como el Ometal 2, Inquilinos y Viñuela, así como residenciales y club de campo, se encuentran con que a cada minuto se suman casas que se les cortó el gas para calefaccionarse.

La suspensión del expendio de GNC tampoco sirvió para poder proveer a los domicilios en su totalidad en la ciudad del sur mendocino, que hace menos de tres años se había comenzado a ilusionar con la construcción del gasoducto que podría haber sido una solución para situaciones de este tipo.

El gobierno nacional paralizó la obra del gasoducto, que está al 90% de avance.

Cabe recordar, que San Rafael y Alvear llevan más de un lustro sin poder habilitar conexiones de gas para domicilio, ni mucho menos para emprendimientos industriales.

El gasoducto, que alcanzó a construirse en más de un 90%, solo recibió como novedad en las últimas semanas, un acuerdo extrajudicial con la Nación, para que la Municipalidad retirara la demanda, y se alcanzó a enviar una remesa que permitió pagar lo que se adeudaba de la obra; pero no se ha vuelto a avanzar.

El Intendente Omar Félix tomó la decisión hace pocos días, de disponer de dinero del presupuesto municipal para la última etapa del gasoducto,  pero las tareas demandarán casi un año más para concluir.

En tanto, una noche de temperaturas bajo como la de hoy, encuentra a la población descargándose en redes sociales y relatando sus vivencias hogareñas.