

El avance de los fraudes electrónicos preocupa tanto a especialistas en seguridad informática como a las autoridades provinciales. En particular, crecen los casos de phishing, una de las técnicas de engaño más utilizadas por los ciberdelincuentes que simula ser una entidad confiable para obtener datos personales o bancarios de los usuarios.
Estos fraudes suelen llegar por correo electrónico y apelan a la urgencia o al miedo para que la víctima actúe sin verificar la autenticidad del mensaje. Para reducir el impacto de este tipo de delitos, el Ministerio de Seguridad y Justicia lanzó una serie de recomendaciones.
Una de las principales es desconfiar de los correos electrónicos no solicitados, especialmente si contienen enlaces o archivos adjuntos. También se sugiere revisar cuidadosamente la dirección del remitente, ya que muchas veces presenta pequeñas alteraciones respecto a la original.
Otra advertencia clave: ninguna empresa legítima solicita datos sensibles —como contraseñas o números de tarjeta— por correo electrónico. En caso de recibir mensajes con este tipo de requerimientos, lo más prudente es contactar directamente a la institución a través de sus canales oficiales.
Para reforzar la prevención, se recomienda el uso de Phishing Quiz, una plataforma online desarrollada por Google que permite entrenarse para identificar correos fraudulentos. La herramienta ofrece ejemplos reales y señala detalles a tener en cuenta, como errores gramaticales, enlaces engañosos o remitentes poco confiables.
La creciente digitalización de la vida cotidiana exige mayor atención a la seguridad en línea. Si bien existen campañas de concientización en marcha, la primera línea de defensa sigue siendo el conocimiento y la cautela de cada persona al momento de interactuar en entornos digitales.