Por la tercera y última jornada del Mundial de Clubes, Boca enfrentó a Auckland City de Nueva Zelanda con la necesidad de golear y dependiendo de un resultado desfavorable a favor de Benfica. El partido finalizó 1 a 1, y el gol del Xeneize fue, en contra, del arquero rival.

Con este resultado, y con la victoria por la mínima de Benfica ante Bayern Múnich, el equipo dirigido por Miguel Ángel Russo quedó eliminado de la competencia sin ganar ni un solo partido.

Boca igualó ante Auckland City y quedó eliminado del Mundial de Clubes 2025

Boca empató frente a Auckland City y quedó eliminado del Mundial de Clubes

Boca salió con todo en el primer tiempo, y lo dominó de principio a fin. El juego fue un verdadero monólogo, con los diez jugadores océanicos metidos en la puerta de su área y El Xeneize intentando cumplir con su objetivo de marcar al menos seis goles.

Para este partido, Miguel Ángel Russo optó por darle confianza a Exequiel Zeballos, por quien el juego se volcó en la banda derecha. No obstante, las cosas no salieron como estaban planeadas.

Sumado a que no tuvo un buen partido, el delantero de Boca terminó siendo reemplazado por Kevin Zenón acusando una lesión, en apenas 23 minutos de juego.

Minutos más tarde del cambio, Boca llegó al tan ansiado gol por intermedio del arquero contrario: Lautaro Di Lollo cabeceó, la pelota impactó en el portero visitante e ingresó al arco.

En los minutos posteriores, Boca intentó aumentar la ventaja de todas maneras, pero la defensa en bloque de Auckland no lo dejó nunca avanzar ni pensar con claridad.

Como si fuera poco, los parlantes del estadio anunciaron el tanto de Benfica ante Bayern Múnich. Así, Boca se fue al entretiempo con un pie afuera de la competencia.

Boca y un segundo tiempo para el olvido

El inicio del segundo tiempo tuvo tintes catastróficos para el Xeneize. Primero, cuando iban apenas 7 minutos, y de cabeza, Auckland City llegó al empate por intermedio de Gray, quien le ganó a Rodrigo Battaglia en el duelo de cabeza.

Dos minutos más tarde, el partido fue interrumpido por una alerta de tormenta eléctrica, una disposición muy frecuente en el fútbol de los Estados Unidos.

El partido estuvo parado por varios minutos y, cuando Boca volvió al terreno de juego, el partido de Benfica ya había finalizado con victoria para el conjunto portugués. Es decir, el equipo argentino jugó lo que restaba eliminado del Mundial de Clubes.

Boca retrocedió ante un equipo semiprofesional todos los casilleros que había avanzado ante dos potencias como Bayern y Benfica, y el plantel y la dirigencia volvieron a quedar nuevamente en el centro de la crítica.